Esta historia trata sobre un perro llamado Phoenix que era víctima de peleas de perros todos los días. Estaba tan débil que finalmente lo...
Esta historia trata sobre un perro llamado Phoenix que era víctima de peleas de perros todos los días. Estaba tan débil que finalmente lo abandonaron cerca de Mecicali. Phoenix estaba flaco, asustado y cubierto de horribles heridas. Su cabeza había sido golpeada tantas veces que no podía abrir los ojos.
Afortunadamente, Virginia lo encontró vagando por las calles e inmediatamente lo llevó al ʋet. El et diagnosticó a Phoenix con Ehrlichia, que es común entre los perros de cebo. Phoenix necesitaba un tratamiento extenso ya que su amante estaba dañado, estaba anémico y extremadamente bajo de peso. Requirió mucho amor y cuidado para recuperarse.
A pesar de todo lo que había pasado, Phoenix seguía siendo cariñoso y amigable. Virginia permaneció con él durante su recuperación y lo llevó a casa una vez que finalmente se curó.
Phoenix ha encontrado un hogar ancestral con Virginia, quien lo ama mucho y ahora disfruta de una vida feliz.
COMMENTS