Hay un tipo de soledad que va más allá de estar solo. Es el dolor de sentirse invisible incluso cuando está rodeado de gente. Es el vacío ...
Hay un tipo de soledad que va más allá de estar solo. Es el dolor de sentirse invisible incluso cuando está rodeado de gente. Es el vacío que se asienta en lo más profundo de tu ser, susurrando una y otra vez que no perteneces, que no eres amado, que no importas.
He tratado de dejar esos sentimientos a un lado, de convencerme de que no son reales. Me digo a mí mismo que estoy siendo dramático, que estoy imaginando cosas. Pero por mucho que lo intente, el peso de la soledad sigue ahí. Me sigue a lo largo de los días y me mantiene despierto por las noches, un recordatorio silencioso pero implacable de lo desconectado que me siento.
Miro a mi alrededor y veo a otros riéndose, conectándose, compartiendo sus vidas con personas que se preocupan. Y me pregunto: ¿por qué no puedo tener eso? ¿Qué me pasa? ¿Soy demasiado? ¿O no es suficiente?
Hay una parte de mí que quiere acercarse, decirle a alguien cómo me siento, pedir consuelo. Pero el miedo al rechazo es abrumador. ¿Qué pasa si no les importa? ¿Qué pasa si piensan que soy una carga? Es más fácil permanecer en silencio, fingir que todo está bien, incluso cuando no lo está.
Pero en el fondo anhelo que alguien se dé cuenta. Ojalá alguien pudiera ver a través de la máscara que llevo, el dolor que llevo dentro. Quiero que alguien me abrace y me diga que importo, que soy amado, que no estoy solo.
A veces me pregunto si alguna vez me sentiré verdaderamente conectado con alguien, si alguna vez encontraré el tipo de amor que hace que el mundo se sienta menos pesado. Y aunque la duda parece abrumadora, hay una pequeña parte de mí que tiene esperanza.
Porque la verdad es que no soy el único que se siente así. Hay muchos otros que cargan con el mismo dolor, el mismo anhelo de conexión y amor. Tal vez todos estemos esperando que alguien dé el primer paso, se acerque y diga: Te veo. No estás solo.
Si estás leyendo esto y alguna vez has sentido lo mismo, quiero que sepas que no estás solo. Tus sentimientos son válidos y tu dolor es real. Pero también lo es tu valor. Eres digno de amor, de bondad, de conexión. Incluso si no se siente así en este momento, incluso si la soledad parece que nunca terminará, por favor aguante.
Hay un mundo ahí fuera que necesita tu luz, incluso si aún no puedes verlo. Y hay gente a la que le importa, aunque no siempre sepa cómo demostrarlo. No estás olvidado. No eres amado. Y tu presencia en este mundo importa más de lo que crees.
COMMENTS